¡Por fin tengo mi pulpiño en casa! Se asustó bastante al ver que era una gallega quien abría la preciosa bolsita en la que estaba envuelto, pero al ver que ya han pasado unos días y que aún no he sacado el caldero y el pimentón ya está más tranquilo. Hasta ha salido a pasear prendido en mi solapa. Seguro que nos llevaremos bien
¡¡Mil gracias chicas!!
1 comentario:
No me extraña que se asustara.... pobre!!! Seguro pensó que acabaría en un caldero de cobre!!! :))
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