Ay que momento, cuando te convences de que lo que estás tejiendo no vas a ponertelo ni en un remoto carnaval, ni quieres tan poco a nadie como para regalárselo. Y decides empezar a ovillar lo tejido... Menos mal que esto se sumó a una buena peli y a una idea inmediata de en qué convertir la seda reciclada de Persones Llanes, con un brillo increíble, pero demasiado despeluchada como para ponertelo encima sin parecer que te acaban de frotar con un nanas. Y así el proyecto de Paris Loop se está convirtiendo en un vacia-bolsillos a ganchillo. Y todos somos más felices.
lunes, 1 de septiembre de 2008
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4 comentarios:
Yo pensaba: ¡Uy!¡Se está haciendo un nidito de ganchillo!.
Yo leia: "...el proyecto de Paris Loop se está convirtiendo en un vacia-bolsillos a ganchillo".
Yo interpretaba: "¡Jo!¡Debe ser realmente cara esa seda para que diga que es un vacia bolsillos!"
Diez minutos después vuelvo al blog, porque acabo hilar cabos y yo escribo: "¡ARGS!" (No se para qué madrugo. Menos mal que ya no estoy en el ciber)
X-DDDD Está simpática la interpretación... De hecho está siendo una lana poco vacio-bolsillos, porque aunque en principio la madeja no me pareció barata es increíble en la cantidad de ovillos que se transformó. Y en la cantidad de vacia-bolsillos que se va a transformar ahora, paradójicamente.
Besiños!
Bueno, míralo por el lado positivo... habría sido peor haberte dado cuenta de que no servía cuando lo hubieras terminado... como me pasó a mi con un jersey hecho con una lana preciosa, pero que al probármelo parecía un oso polar de colorines :)))
Cierto Adijirja, es una decisión que es mejor tomarla cuanto antes mejor. Me pasó lo mismo que a ti con una especie de bufanda transformable en camiseta, que debí ponerme dos veces, y que ahora mismo está convertida en ilusionantes ovillos de un algodón precioso.
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