martes, 21 de julio de 2009

Manos del Uruguay


Tejer con esta lana ha sido un regalo. Mientras ovillaba camino a Galicia me planteaba seriamente no tejer nada y usar la madeja a modo de bufanda-collar. A ver si consigo no comprar nada de lana, acabar con un 40% del alijo, y autorregalarme algo más de Tira del Ovillo para navidad... Por cierto, los jaboncillos que manda Anita de regalo con el pedido son una gozada, me estoy planteando seriamente pedirle la receta.

lunes, 20 de julio de 2009

Nuevos inquilinos

Cuando volvimos de tierras gallegas nos encontramos con esta plumífera inquilina en la maceta del balcón. La pillamos concentrada para poner un huevo porque poquito después de esta foto encontramos dos huevos en vez del solitario que se puede ver en la segunda imagen.
Al principio se asustaba en cuanto abríamos la puerta, pero ahora ya nos deja entrar y regar el resto de las macetas a 10 cm de distancia. Nos está dejando la planta perdida de plumas, y peor será cuando nazcan los polluelos... Pero tenemos que confesarlo, nos sentimos orgullosos de que haya escogido nuestra terraza esta sucia rata alada. Hasta nos parece tierno cuando padre-paloma hace el relevo con madre-paloma para seguir incubando. Es simpático cuando se posa en la barandilla más alta del balcón y se va deslizando por la frondosa planta para caer encima de los huevos, va con sus patejas haciendo malabarismos la muy cameladora.

Ya hace dos años tuvimos una paloma que aprovechó nuestras vacaciones para incubar en el mismo sitio. Es más, estamos convencidos de que nos vio hacer las maletas y fue planeando donde colocarse en el balcón, visto que ibamos a estar tiempo fuera (jummm.... mete tres tipos de calzado... eso son 15 días por lo menos para incubar tranquila....) Es más, seguro que esta paloma es uno de esos polluelos que nacieron mientras nosotros acampábamos en la Bretaña, y le dijo a su palomo déjate de alféizares, que yo conozco un sitio ideal para incubar... Aquel año uno de los pollitos murió, y formó parte un tiempo del compost de nuestra maceta, hasta que a mí me venció el repelús y tiré toda el contenido de la maceta (planta incluída, creo recordar)